Queridos lectores (sí, aún espero que alguien me lea, de hecho, que sean más de uno):
Yo sé que este blog tienes telarañas hasta en lugares que no conozco, lo he dejado muy olvidado y sólo tiene un par de publicaciones. Tal vez no sea la mejor escritora del mundo, ni la más constante, ni la más original, peor lo que si estoy segura es de que pongo todo mi corazón y alma en mis escritos, y me encantará que las personas lean mi blog.
A las personas que ya han leído mi único cuento les digo: la paciencia que han tenido va ser recompensada. Voy a comenzar con mi primera historia, un tipo de novela o serie, cómo gusten llamarle. Lo sé, el problema de autoría y todo eso que siempre me preocupa, pero esta es una historia muy romántica, linda y muy, muy triste.
Ahora ya no me importa si mi historia desaparece, se la roban, la usan para sus trabajos de la escuela, se la apropian… lo que sea que las personas horrorosas que se dedican a usar las mentes de otros en vez de las propias hagan. En buena parte ese es el punto: que la lean muchas personas, que la recomienden a sus amigos, conocidos, vecinos, familiares, a todos los que puedan… Porque está dedicada a una persona muy importante en mi vida, que me mostró la luz de la música, el placer de escribir, un individuo que vino a calmar mi llanto, a darme la proyección de la viada que nunca antes logré ver.
Es una persona que dejé de frecuentar ya hace muchos ayeres, y espero que, esté donde esté, encuentre éste pequeños espacio, que lea mi historia, que sepa que me sigue importando, que no ha caído a la profundidad del olvido. No importa lo que piensen, si lo lee él, su esposa, sus hijos, sus padres, los míos... sólo es un pequeño monumento a mi pasado, a eso que quiero dejar atrás, pero no quiero que caiga al olvido.
Me inspiró un libro muy bueno y mexicano llamado “La visión de los vencidos” de Miguel León Portilla. Y para quién todavía se lo pregunta, sí, se basa en una historia real, aunque me daré el lujo de exponer hechos que tal vez no sean totalmente verídicos, o en los que me aventure a imaginar la situación del personaje principal…
Deseo, les ruego, les exijo (por lo que más quieran) que respeten esta historia tan importante para mí, y que como yo, nunca olviden que el universo es eterno para nosotros, pero nosotros somos eternos en comparación con una sencilla flor… Y el vuelo de la mariposa…
